Creo firmemente que es esencial entender cómo funciona nuestro inconsciente. Sin este conocimiento, nos desgastamos con estrategias que agotan nuestra energía sin resultados reales.
Para mí, el conocimiento es poder: el poder de transformar nuestra vida, sanar nuestras relaciones y alcanzar nuestra felicidad. En mis talleres, no doy respuestas, enseño a pescar, para que cada individuo pueda encontrar sus propias soluciones y empoderarse desde adentro.
Mi misión es contribuir a una sociedad más feliz y en paz, comenzando por la paz interior de cada corazón.
En cada Encuentro Contigo, facilito el camino para que cada persona descubra su propósito y entienda que, sin él, se pierde en la vida, perjudicándose a sí misma y a los demás. Es fundamental sanar la frustración y la culpa que cargamos, tanto en la familia como en el trabajo, porque desconocemos las verdaderas causas de nuestro sufrimiento.
Enseño técnicas que empoderan, que fortalecen el interior de cada persona para afrontar con valentía cualquier desafío, por difícil que parezca. Lo que buscamos es un entrenamiento mental y emocional que permita atravesar las adversidades con resiliencia, transformando cada experiencia en una metáfora de una vida plenamente vivida.
Siento una profunda conexión con los niños, que a menudo manifiestan el amor hacia sus padres a través de síntomas físicos y emocionales. Acompañarlos, al igual que a los padres, para transformar la culpa en reparación, creando vínculos llenos de validación emocional y respeto, es uno de mis compromisos más profundos.
A través de estos Encuentros Contigo, deseo ayudar a todos a comprender que nuestras acciones son reflejo de lo que hemos recibido y de lo que somos. Si todos entendemos que somos víctimas de víctimas, el juicio pierde sentido, y brotan la compasión y la indulgencia en nuestros corazones. Mi propósito es transformar la queja en acción, animar a cada ser humano a verse como su propio proyecto más importante y a tomar decisiones que nutran su bienestar.
Quiero que cada persona que participe en un Encuentro Contigo integre en lo más profundo de su ser que, aunque sus padres hayan sido imperfectos y los traumas existan, de esas raíces brotan semillas que pueden crecer en árboles hermosos, si se riegan con gratitud y acción disciplinada. De esta manera, podemos dejar un legado generacional de abundancia y frutos para las futuras generaciones.
Es mi misión crear un mundo donde todos entendamos que somos parte de un todo, un fractal de la vida, al servicio amoroso de la propia existencia.